Rafael Madueño: »El deseo de escribir siempre va precedido de sentimientos»

Rafael Madueño Canales, natural de Montoro (Córdoba), desarrolla su labor profesional como maestro de primaria en el C.E.I.P. Ntra. Sra. de la Encarnación en Peal de Becerro (Jaén), mientras compagina su afición por la escritura. Poemas descarnados y un suspiro de esperanza nos hablan de situaciones comunes a cualquier persona, vistas desde la perspectiva del autor; escritas en su mayoría en primera persona e impregnadas, como no podía ser de otra manera, de los sentimientos que éstas generan.

viveLibro (VL): ¿Por qué poemas y no otro formato? 
Rafael Madueño (RM): Probablemente porque es el formato que mejor me permite sintetizar un sentimiento o un pensamiento. Es una manera rápida de esbozar los primeros retazos de alguna idea que bulla en ese momento en mí; por otro lado, el verso octosílabo suele fluir de manera natural cuando empiezo a escribir.

VL: La mayoría de sus poemas están escritos en primera persona, ¿están también inspirados en sentimientos propios? 
RM: Todos y cada uno de ellos son ideas, opiniones o sentimientos propios. No creo que pueda escribir poemas que no sean el reflejo de mi vida interior, puesto que el deseo de escribir siempre va precedido de ideas, sentimientos, alegrías, tristezas, recuerdos… que tienen la necesidad imperiosa de salir al exterior sin ninguna dilación. Creo que no deja de ser una manera de desahogar el espíritu.

VL: ¿Qué se van a encontrar los lectores en su obra? 
RM: Pues lo que comentaba anteriormente, sentimientos que son comunes a cualquier persona, unas veces contadas metafóricamente y otras de manera más explícita.

VL: ¿Qué tipo de situaciones comunes tratan sus poemas? 
RM: Los anhelos, miedos, el amor, el desamor, las dudas, el entorno personal y social que nos rodea, la convulsa sociedad en la que vivimos o la injusticia social, entre otros.

VL: Es maestro de primaria, ¿tiene en mente escribir algo que esté más enfocado a los niños? RM: Precisamente este libro tiene como epílogo un cuento que nació en una de mis clases, cuando trabajaba el cuento y sus características con un grupo de alumnos. De ese modo vino al mundo El pirata Cascaribe, el cual, debe su nombre a un alumno de 4° de primaria y cuya moraleja es mi deseo de inculcar en los chavales un espíritu irredento como salida a las adversidades que van a encontrar en su camino.

VL: Y ahora, ¿cuáles son sus plantes de futuro? 
RM: El próximo es un proyecto compartido, es un libro de poemas escrito conjuntamente con una alumna que ya se nos fue al instituto pero que a pesar de su juventud, pues sólo tiene 15 años, escribe con una madurez impropia de su edad.