¡Hola, Azucena! Por fin nos presentas Pandora, la tercera parte de tu trilogía que inició su viaje con la publicación de Medusa en 2020. ¿Cómo ha sido para ti este proyecto?
Un maravilloso viaje personal. No creía en mí, ni en mis posibilidades y ahora confío en seguir mi andadura como escritora.
¿Qué van a encontrar los lectores de la trilogía en Pandora?
Toco muchísimos temas y me cuesta hacer un resumen, pero la línea conductora de toda la trilogía es cómo vemos el amor y las relaciones personales y cómo deberíamos verlas. El amor está manipulado desde hace siglos, debemos reflexionar mucho antes de empezar una relación de pareja.
¿Se trata del cierre definitivo de esta historia o te planteas la posibilidad de regresar en un futuro?
Es el cierre definitivo de esta historia, pero es el principio de la siguiente.
¿Qué significado se esconde detrás del título?
Pandora es la diosa que abre la caja y deja escapar todos los males y desastres de la humanidad, pero en realidad Pandora significa la dadora de dones, de la misma manera se ha manipulado la imagen de la mujer, vista como símbolo de la maldad, la manzana roja o la serpiente, aquella que engaña al hombre y lo lleva a la perdición, pero Pandora deja la esperanza en la caja, de la misma manera la mujer es símbolo también de la fertilidad y la maternidad y si hay alguna manera de cambiar el mundo desde luego no lo dudo, es a través de la educación, los niño son la esperanza.
Nos gusta decir que todos los autores dejan una pequeña parte de sí en sus obras. ¿Qué parte de ti podemos encontrar en Pandora?
Mi parte de mamá, hablo de algo que conozco bien.
A la hora de crear esta historia, ¿qué dificultades te has encontrado y qué te ha resultado más sencillo?
Intentar que el lector no se pierda en la historia de tres novelas diferentes, pero que es solo una. Lo más sencillo ha sido escribir el final, me hacía mucha ilusión.
¿Qué géneros te gusta leer y escribir habitualmente? ¿Te planteas aventurarte en otros diferentes?
Me gusta la novela histórica y me encanta la poesía, me gusta leer sobre arqueología y mitología, pero creo que es el momento de cambiar.
¿Tienes autores o autoras favoritos que te sirvan de referentes?
Sí, muchos, pero reconozco que son clásicos, como Almudena Grandes. No tengo ningún autor actual que me sirva de referente y si me compro un libro, no es de un autor superventas.
¿Qué le dirías a los lectores para aún no conocen la trilogía para que decidan embarcarse en este viaje?
Van a hacer un viaje apasionante por ese sentimiento tan común y a la vez tan desconocido: el amor.
¿Tienes alguna costumbre o método a la hora de ponerte a escribir?
Tengo que estar sola y concentrada. Reconozco que soy caótica, que escribo por partes y no del tirón, que voy y vengo en la historia, que me centro en escribir y me olvido de la ortografía.
¿Tienes algún nuevo proyecto en marcha?
Sí, y tengo muchas esperanzas en esta nueva novela. También me gustaría sacar poesía.
¿Qué te ha parecido la experiencia de publicar tu obra con nosotros?
A los lectores de esta entrevista, les va a parecer que solo quiero adular a la editorial, pero no tengo ninguna necesidad de hacer tal cosa. Yo agradezco enormemente la confianza que habéis puesto en mí, el apoyo, la paciencia y la profesionalidad. No tenía ni idea de cómo moverme en este mundo y me lo habéis puesto todo facilísimo. Lo único que siento es agradecimiento.
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